El barro es uno de los materiales más comunes en la cocina mexicana, sin embargo, para que tus piezas perduren, es importante darle un cuidado especial, por ello traemos para ti algunos cuidados del barro para lograrlo.
Cuidados del barro para utilitarios
Recomendaciones para la el cuidado del barro, para piezas como: tazas, bowls, platos.
• Limpiar las piezas antes del primer uso.
• Después de su uso, lavar con una esponja y asegurarse de que la zona esté completamente seca.
• No almacenar piezas mojadas.
• No utilizar el lavavajillas.
• No almacenar piezas en montones.
• No remojar las piezas en agua durante más de 3 días.
• No utilice herramientas demasiado afiladas ya que pueden dañar las piezas.
• Los alimentos grasosos pueden manchar o decolorar las piezas, en este caso, lo mejor es lavarlos rápidamente.
Cuidados del barro para piezas decorativas
Aquí tienes algunos consejos para el cuidado de tus piezas de barro:
- Limpieza suave: Limpia tus piezas de barro con un paño suave y seco para eliminar el polvo y la suciedad superficiales de manera regular. Evita el uso de cepillos o esponjas abrasivas que puedan rayar la superficie.
- Lavado a mano: Si es necesario lavar tus piezas de barro, hazlo a mano utilizando agua tibia y un detergente suave. Evita sumergirlas en agua durante períodos prolongados, ya que el barro puede absorber agua y volverse quebradizo.
- Secado al aire: Después de lavar las piezas, déjalas secar al aire completamente antes de guardarlas o exhibirlas. Evita el secado rápido utilizando fuentes de calor intenso, como hornos o secadoras.
- Almacenamiento adecuado: Coloca tus piezas de barro en un lugar fresco y seco para evitar la exposición a la humedad y los cambios bruscos de temperatura. Usa un paño suave o papel de burbujas para envolver las piezas si planeas almacenarlas durante un tiempo prolongado.
- Protección contra golpes: Manipula tus piezas de barro con cuidado y evita golpes o caídas que puedan causar roturas o fisuras. Si tienes piezas frágiles, considera colocar almohadillas o material acolchado en las áreas donde las almacenes o exhibas.
- Evita el contacto con alimentos: Si tienes cerámica o artículos de barro sin esmaltar, evita el contacto con alimentos, ya que estos materiales porosos pueden absorber líquidos y mancharse. Utiliza utensilios adecuados si deseas servir alimentos en estas piezas.
- Mantenimiento de esmaltes: Si tus piezas de barro tienen esmaltes, inspecciónalas regularmente para detectar grietas o desgaste en la superficie del esmalte. Evita el uso de objetos afilados que puedan rayar o dañar el esmalte.
- Reparaciones profesionales: Si alguna de tus piezas de barro se daña, considera la posibilidad de llevarla a un ceramista profesional para su reparación. Intentar repararla por tu cuenta puede empeorar el problema.
Cómo curar las cazuelas de barro
Curar antes de usar. Si es una vasija nueva o de barro, es necesario «endurecerla» antes de cocinarla porque los poros de la arcilla están abiertos y pueden agrietarse o incluso agrietarse al exponerse al calor de la olla o sartén. Para evitar esto, debes remojar la vasija de barro en agua fría durante al menos 8 horas y luego quitar con una esponja el polvo de arcilla restante.
Pero para alargar la vida de tus ollas y sartenes no sólo debes tratarlas antes de usarlas, también debes seguir otros consejos para mantenerlas en buen estado durante mucho tiempo.
Evite los cambios bruscos de temperatura. Se recomienda no colocar una vasija de barro caliente directamente sobre un plato o superficie fría, ya que un cambio brusco de temperatura puede provocar que se agriete. Para ello, se recomienda colocar un paño de cocina resistente al calor entre estas superficies y el recipiente.
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No utilice detergente. No necesitas usar detergente ni jabón para limpiar tu vasija de barro. Esto se debe a que la mayoría de las arcillas dejan una película o molécula en los poros que, cuando se usa, libera un olor en los alimentos cocinados.
Utilizar bicarbonato para su limpieza. El bicarbonato es la mejor opción para limpiar el barro y eliminar los malos olores. Mantener seco y almacenar adecuadamente. Secar bien el frasco antes de guardarlo ayudará a conservarlo.
Después del secado, durante el almacenamiento, se debe voltear la tapa y poner un pañuelo de papel entre la botella y la tapa para evitar que entre aire y se forme moho.
Cuidados del barro
